Dennis González-Trompetas
Stefan González-Batería
Aaron González-Contrabajo
Rodrigo Amado-Saxo Tenor
Sala Zac, Barcelona, Catalunya, España.
Ayer asistí al concierto en Barcelona de Dennis González Yells at Eels con el saxofonista lisboeta Rodrigo Amado.
En pocas palabras, el concierto fue realmente espectacular en música y ejecución. Éramos muy pocos en la sala. Alguna gente parecía haber asistido sin tener ni la más remota idea de lo que iba a ver. Al llegar me senté en segunda fila, y me fijé en tres matrimonios que rondaban los 60 años cuya pinta me hizo pensar que con el nombre del líder quizás habían pensado que seria un concierto de rancheras o latin jazz. Y efectivamente, al segundo tema emigraron de la sala.
Con este tipo de música vanguardista, en la mayoria de casos, esa gente cae por su propio peso y bien se marchan a las primeras de cambio o se ponen a hablar entre ellos para hacerse los entendidos o sobrellevar el aburrimiento que les produce. Lo peor fue una pareja de cotorras, macho y hembra, que se sentaron a mi lado, por lo que tuve que clavar mi mirada asesina en ellos y hacer señas para que se callasen.
En cuanto a la música, destacar la parte incisiva a la vez que efectiva del batería y del contrabajo, hermanos, hijos de Dennis, y con gran afección por el hardcore. Dennis llevaba dos tipos de trompetas, la típica y otra más rechoncha. Todo un crack el hombre además de ser una gran persona. Rodrigo Amado al saxo tenor también hizo un gran papel en distintos modos de tocar desde rabioso a lo Pharoah Sanders “jabalí malherido” hasta más melódico.
El estilo de la banda me sugiere una combinación de estilos que se sobreponen con elegancia y que le dan una personalidad propia. El hecho que los hijos de Dennis tengan esa profusión por la música dura, unido a la ortodoxia vanguardista de Dennis hace que unan fuerzas para obtener un nuevo producto fresco que pueda consumirse de varias formas en cuanto a que cada oyente puede extraer aquello que más le conviene, sean ritmos fuertemente marcados por batería y contrabajo, sean los eventuales alaridos de la parte de vientos que a veces se tornan en formas más melódicas igualmente efectivas.
Bernie.
“dos tipos de trompetas, la típica y otra más rechoncha” cuando era una trompeta y una corneta C, y hablar del público, al que no le gusta la vanguardia, me parece un poco flojo su comentario..